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domingo, 26 de agosto de 2018

Calma fría

A veces siento que me caigo.

A veces siento que estoy atrapada bajo las olas

Y se me lleva la marea.

Siento que me ahogo en una profundidad azul.

Todo es oscuro y no me muevo.

Siento frío. Pero estoy en calma.


Y a veces quiero llorar

Pensando que no despertaré jamás.

A veces quiero llorar 

Y no se por qué. 

No me duele nada, no siento nada.

Pero finalmente lloro en silencio,

Con la cabeza baja.

Atónita, sin entender por qué las gotas

Se deslizan por mi cara.


A veces siento que estoy tan cansada

Que no queda en mi ni un poco de fuerza.

A veces estoy tan cansada 

Que desearía estar muerta.

Y me echo en la cama sin poder dormir,

Doliéndome la cabeza, sintiendo pena de mi.

Siento que se me escapa el tiempo

Y no puedo mas que dejarlo ir.


Siento el agobio en mi piel

Como si estuviese encerrada.

Como si nada esperase por mi

Como si yo estuviese parada.

Agobio. Rabia. 

Siempre siento rabia por no saber

Por querer la justicia vacía

Que nadie parece comprender.


Y siempre. Siempre.

Siempre me siento sola.

Aunque me rodee de gente.

Siempre estoy sola.

Y ellos son reales. Se que están a mi lado.

Y siento que me hablan, que me tocan, que me quieren.

Pero yo estoy sola. En una calma fría,

Que nadie comprende.

lunes, 20 de agosto de 2018

Bonita ignorancia


Echo de menos querer sincera. 
Un amor de esos que saben a madera vieja,
A flores secas y a brisa de media tarde.
Que te dan calma en la tormenta del alma, y calientan con el sol de poniente.
Anochecer sonrojada pensando en mañana,
Que creo, será diferente.
Pensar en nada y aparecerse, en vez de tantos y tantos problemas y dudas que ahora me aparecen.
Quisiera amar descalza, corriendo entre las plantas, no temer pincharme en los peligros que esconde el césped.
Y aunque ahora ya no temo, nada es igual que antes.
Todo quedó al alcance menos aquello que tuve.
Dejo atrás el pasado y ahora conozco nostalgia.
De mi vida se acabó esa ignorancia, y ahora que todo está lejano, nada quiere que vuelva atrás en la distancia.
Pero ojalá volver a desconocer.
Ahora nada es puro o ingénuo, nada lleva sentimiento, el amor de ese del que se palpa.
Llevo años rebuscando entre las sobras,
Todos esos logros perdidos en mi memoria.
He caído desafortunada en una continua vida de clarividencia.
Ojalá pudiera volver a no saber nada, y cada día vivir entre sorpresas.
Todas esas cosas que no conoces y deseas.
Qué bonita es la ignorancia.

viernes, 3 de agosto de 2018

Tanto es ser libre

Tanto fue ser libre

Tanto, que ahora mis manos anhelan 

Y buscan en las avenidas

En las calles, en las aceras.

A penas me presiona el pecho

Y ya siento que me ahoga la vergüenza.

El nudo en la garganta,

Tratar de hablar sin poder controlar

El hipo que trae el llanto.

Notar cómo el daño a veces alivia, 

Enfurecida golpeando las paredes de la jaula.

Mira cómo ocurre la vida

Y pasa.

Admiraba las calles sin pensar que algún día

Nada quedaría allí de mi, ni un recuerdo.

Ahora que me miro las manos

Me vendí a expensas del razonamiento.

Sin verdad sólo hay juicios sin conocimiento.

Yo quería ser siempre libre

Y ahora no queda de ello ni un resquicio.